Descripción

La miel tipo mantequilla, obtenida de la floración de acahual, aceitilla y las flores características del mes noviembre en el Valle de Oaxaca, ofrece una experiencia de sabor y consistencia que captura la esencia misma de esta temporada. Su aroma es envolvente, con matices florales profundos combinados con notas herbáceas y un sutil toque terroso que evoca los campos en su máximo esplendor. En el paladar, su sabor es delicadamente complejo: una dulzura equilibrada con un ligero retrogusto a flores silvestres, complementado con una frescura casi imperceptible que recuerda el aire puro y fresco de los días otoñales en el valle, todo esto en una miel que se ha cristalizado con los frios de Diciembre, otorgándonos una miel transformada en finos cristales.

En términos visuales, su color ámbar claro resplandece con una opacidad cremosa característica de su textura cristalizada. Su consistencia, similar a la de la mantequilla, es suave y homogénea, perfecta para untar y disfrutar de su riqueza sin esfuerzo.

Además, esta miel es un reflejo directo de las condiciones de noviembre en Oaxaca: un clima moderado, con días soleados y noches frescas, que propicia una floración diversa y abundante de color amarillo. La influencia de estas condiciones climáticas se traduce en las notas florales y el carácter untuoso de esta miel, convirtiéndola en un producto único y profundamente ligado a su lugar y tiempo de origen.

Es, en esencia, un tributo a la temporada de cosecha y al ciclo natural de la región.